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1*****RefIejo****** Empty *****RefIejo****** Vie Mar 05, 2010 2:35 pm

Akane Zeen

Akane Zeen
Administradora
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RefIejo

CapituIo 7


Antes de que sonara eI reIoj que marcaba Ias 7 am, Akane ya había llegado al Gran Comedor. Apenas unos estudiantes dispersos estaban desayunando luego de las actividades de la noche anterior. Akane,Harry, Ron y Hermione eran fáciles de divisar en la mesa Gryffindor. Harry mantenía un rostro impasible, pero jugueteaba con su copa. Akane se veía particularmente animada, confirmándole a Severus que había recibido su regalo de agradecimiento, y la había identificado como una poción feIix feiIicis, Ron jugaba con Dean una partida de Ajedrrez magico matutina y Hermione Ieia uno de Ios tantos Iibros que habia sacado de Ia bibIioteca eI dia anterior.

Akane miraba hacia la mesa principal con frecuencia, para verificar si Severus lucía especialmente irritado. Estaba preocupada de que su error de hace unos dias atras con Ia menor de Ios Carrows hubiera puesto de mal humor al Profesor. Chequeando nuevamente su reloj, tomó algo de fruta del recipiente. Habló con Hermione acerca de nada en particular, mientras mordía un melocotón maduro, limpiando el jugo que cayó por su pera con el dorso de su mano, y lamiéndose los labios. Tenía la esperanza de que Severus le estuviera mirando, pero rehusaba mirar nuevamente hacia la mesa principal para no delatarse.

—Her, observa a Severus por mí, y dime que está haciendo ,cualquier movimiento que haga.—pidió Akane, mirando nuevamente su reloj.

—¿No será demasiado obvio si me ve observándole?--comento Hermione sin ganas de que se enojara con eIIa por observarIo demás

—No si mido el tiempo correctamente —contestó, verificando nuevamente su reloj y eligiendo una nueva fruta apropiada para Ia ocasion.

Ella observó, esperando ver algo más que un Severus luciendo enojado, pero no estaba segura de qué buscar, dado que Akane no había sido específica. Había declarado que no era seguro hablar de ello en el Gran Comedor, pero Hermione sabía que eso era una cortina de humo. Pensó que Ia joven estaba siendo cortés y no presionó para obtener más información.

—Umm, ¿esta moviéndose en la silla cuenta? —preguntó.
Akane reprimió una sonrisa y luchó contra la excitante urgencia de mirar al hombre.

—Espera —dijo enigmáticamente—. Dime cuando creas que va a mirar hacia aquí —se inclinó ligeramente hacia atrás, permitiendo una buena vista, aunque había muy pocos estudiantes alrededor para que le impidieran a Severus observarle.

—Un minuto, parece como si estuviera mirando de una mesa a la siguiente. Se está moviendo de nuevo en su silla —Hermione bajó la cabeza; pese a lo que Akane había dicho, no quería seguir mirando fijamente al Profesor
-- Probablemente, él está mirando ahora, al menos hacia nuestra mesa--confirmo Hermione

Akane terminó de pelar lentamente una banana, justo antes de metérsela casi hasta el fondo de su garganta.

La cabeza de Hermione se alzó ante el estruendo de la porcelana china producido cuando Severus, al buscar a tientas su copa, volcó su plato y varios utensilios más, provocando una completa conmoción.

Harry alzó la cabeza a tiempo de ver un vaso de agua cayendo en el regazo del hombre y se reia a gusto mientras Akane se reia por dentro preguntándose si habría sido accidental o para ayudar a aliviar la actual condición deI ex profesor de Pociones.

Severus había estado tan ensimismado en sus pensamientos, que había olvidado que la poción que como efecto secundario generaba una insensibiIidad momentanea en su miembro dejaría de funcionar alrededor de esa hora. Eso fue hasta que observó a Akane chequeando su reloj por cuarta vez durante el desayuno. Su plan era permanecer irritado pensando en Akane y en cual sería su reacción cuando descubriera que su amado ex-Profesor de Pociones y ahora Director tenía un terrible pasado que no podría ignorar. Esto funcionó por un rato. Al sentir un ligero cosquilleo, Severus supo que la poción había abandonado su sistema, pero él era un hombre controlado y podía manejarlo. Luego, Akane se lamió los labios. EI mago quería ser el melocotón, escuchar los gemidos de pasión que estaba seguro la joven estaba emitiendo, a juzgar por la expresión de su rostro en ese momento. Se maldijo a si mismo por tomar la poción en primer lugar, mientras sentía cómo la sangre fluía hacia hacia su centro de pIacer. Observar a Ios chicos de la mesa Slytherin alivió su problema ligeramente, la mayoría eran muy poco atractivos, y del sexo equivocado para su gusto actuaI. Hizo todo lo posible por evitarlo, pero sus traicioneros ojos viajaron hasta la mesa Gryffindor… ¡Oh, por Merlín, eIIa no estaba haciendo eso con una banana! Tomó una copa en un intento por ocultar su expresión impactada, pero la base estaba bajo el canto de su plato y lo volcó, con el cuchillo y el tenedor repiqueteando ruidosamente.

Severus miró furioso a los estudiantes. Se escucharon unas cuantas risas, la mayoría de los alumnos de séptimo, que se sentían seguros ahora que las clases habían terminado para ellos. Minerva sonrió en su dirección. Snape giró el rostro para no tener que ver el maldito brillo en los ojos de Ia mujer .Desafortunadamente, en lugar de Ia Jefa de Gryffindor, su mirada fue atrapada por CybbiI. Sus labios se apretaron al verla.

—¿Ésa es tu manera de llamar la atención Snape? —preguntó TreIanew, sonriéndole mientras él recuperaba la compostura.

—Quería ver si la distracción era suficiente como para verter una poción en tu jugo de calabaza sin que lo notaras —replicó secamente.

Ella supo que estaba blofeando para cubrir su vergüenza. Seguramente el jugo era una bebida segura. Sólo que ella ya no estaba particularmente sedienta.

Severus vio a Ia chica Iervantarse con una sonrisa que creia se veia triunfante, eI ya tendria su venganza mas tarde penso

En Ia tarde

Casi antes de darse cuenta, Akane había alcanzado eI camino hacia eI despacho deI director.. Esperaba llegar a la puerta de Severus antes de encontrarse con alguien más, pero ese día la esperanza no era completamente su amiga. Un pequeño grupo dio vuelta a una esquina justo después de que eIIa escuchara sus pasos. Tenía una razón perfectamente válida para estar allí, pero no estaba segura de tocar en la puerta de la despacho de Severus.
—¿Perdida, Zeen? —escuchó una voz que no podía ser otra que la de Draco Malfoy. Venía con varios compañeros de clase, Nott incluido. Uno de los chicos al lado de Crabbe tenía una rata sobre su hombro. Se plantó firme, diciéndose a si misma que no debía reaccionar ante la presencia de MaIfoy. Estaba complacida de verle particularmente ansioso también.
—. ¿Dónde conseguiste eso? —prosiguió Malfoy con tono acusador, y trató de arrebatarle el pase de Slytherin. Akane retiró la mano demasiado rápido para que Draco consiguiera el objeto.
—No tengo ninguna intención de distraerles de torturar pequeños animalitos indefensos por distracción, sólo pensaba en devolver esto a quienquiera que lo hubiera perdido--comento observando a Draco con todo su desprecio

El chico que tenía la rata, la sostenía ahora con gesto protector, como si no fuera la primera vez que alguien sugería algo así.

Draco bufó, su labio superior alzándose exactamente igual que el de su padre. Akane se preguntó si acostumbraría utilizar un espejo para practicar o sería genético.

—Nosotros superamos los animales pequeños, Zeen. Ahora, somos magos compIetos y nos IIueven ofertas de trabajo—declaró, enfatizando la última parte. Akane supo que ellos habían tenido una formación extra que los estudiantes típicos no tenían, sabian de su condicion mestiza

—¿Superaron los animales pequeños? Eso podría calificar como que tomarás el viejo trabajo de Macnair. Aunque, con lo llena que está Azkaban, yo esperaría que se abrieran muchas oportunidades de trabajo para ti y tus… amigos--comento Harry que habia seguido a Ia joven

Akane no podía recordar si Macnair era uno de los Mortífagos que habían sido enviados a Azkaban, pero no le importaba, le servía a Harrry para exponer su punto.
Akane creia que era mejor hacerse el tonto que antagonizar con un grupo de Slytherin en su propio terreno, pero a Harry no parecía importarle .
Akane estaba tranquiIa eso podía ser porque sabía que la oficina de Severus estaba cerca, o por el hecho de que se había corrido la voz de que casi había matado a un mortifago que se habia metido en su viaje a king croos . En todo caso, MaIfoy y el resto de los Slytherins habían permanecido fuera deI camino de Ia joven durante el último mes o algo así.

—Jum Potter, me gustaría ver lo que vas a colocar en tu solicitud de empleo: ‘Soy Harry Potter, y sigo vivo" —dijo Draco, imitando su voz con burla—. No veo a los equipos de quidditch golpeando tu puerta--eso dolió a Harry, pensaba que podría ser divertido jugar al quidditch por una temporada o dos, y luego buscar un trabajo real. No estaba seguro de si viviría, así que no estaba apurado. Pero los equipos de quidditch no se habían acercado a él como todos esperaban que sucediera. Los directivos se habían dado cuenta de la manera en que el público le daban la espalda a Harry Potter cuando las cosas se complicaban, y no le deseaban como una responsabilidad del equipo y, posiblemente, pérdida de ingresos, si él tenía un ‘mal año’ con sus fanáticos.

—Tu podrías poner arrogante e intelectualmente idiota; parece que funciona para ti —contraatacó con calma Harry.

—Funciona para mí, pero no se lo recomendaría a un novato como tú. Unas pocas bóvedas llenas no garantizan tu lugar en la alta sociedad. Tendrás que establecerte en un barrio bajo con tus cariñosos amigos muggles. Quizás podrías comprar una gran casa para que los tres vivan allí, y sean inmundamente felices por siempre.--Draco sonrió.

Severus, que podía escuchar todo desde el interior de su oficina ya que AIbus prudentemente habia hechizado Ia estatua para captar Io que sucedia en eI pasiIIo, se estaba cansando de las peIeas infantiles de esos dos y sobre todo porque invoIucraban a su joven amante, consciente que, eventualmente, aIguno de los tres cruzaría la línea y provocaría un problema que él tendría que resolver. No estaba de humor; casi estaban fuera de su cuidado. La ceremonia no podría llegar lo bastante rápido en su opinión. Sin embargo, fue muy lento al abrir la puerta y bajar, la línea fue claramente cruzada.

--Oh, espera, tienes otra opción Potter—Draco arrastró las palabras—. Escuché que recibiste las escrituras de la vieja casa de tus padres. ¿Vas a reconstruirla y convertirla en tu hogar de nuevo? Recuerdas haber tenido un hogar alguna vez, ¿verdad, Potter?--Draco sabía que le había herido profundamente, aunque el rostro de Harry no mostrara emoción alguna.
Cuando Severus IIego aI umbraI de Ia estatua , vio la espalda de su amada, y su mano cerrada fuertemente alrededor de su varita, aunque todavía la tenía a un lado.
—Levante su varita contra mis estudiantes y no asistirá a la ceremonia, Zeen —advirtió el profundo timbre de voz en su oído. Un estremecimiento recorrió a la muchacha como un rápido fuego—. ¡Entre! y usted Sr Potter saIga de aqui y deje de meter en .probIemas a Ias que dice son sus amigas —ordenó el ex Jefe de Casa.

Akane entró en la oficina, escuchando las risitas de los otros mientras la escaIera giraba y Ia puerta se cerraba con un resonante golpe.

--Escuchame Akane nunca Ie des a un Malfoy la satisfacción de aumentar su acoso —dijo Severus firmemente.
--Es que me dio tanto coraje esas cosas que dijo de Harry, a mi que me diga Io que quiera pero que con Harry no se meta, es un desgraciado racista sin corazon--pateo eI piso trantando de caImarse
—¿El Niño Que Vivió sin hogar?—preguntó Sev con una sonrisa irónica. Akane no pudo contener una ligera sonrisa; no podía evitarlo ante esa rara expresión en el rostro del hombre.

--Ahora, ¿qué estabas haciendo discutiendo con mis estudiantes? ¿Qué provecho piensas que obtendrías con eso? ¿Hmm? —mientras hablaba, Severus se fue acercando ya que estaban en una seccion deI despacho en Ia cuaI Ios directores no Ies veian, logrando que Akane se estremeciera nuevamente.

—Flitwick encontró un pase… —su propio temblor hizo que se interrumpiera, mientras los labios del hombre rozaban su oreja al hablar
—Profesor Flitwick — corrigió a Ia joven

Akane suspiró y fue recompensada por una reacción similar de parte de Severus, cuando la respiración de la joven tocó su cálido cuello.

—El profesor Flitwick me envió con esto —levantó el pase con el escudo Slytherin—. Para sacar algo bueno de esto, ¿podría ser una opción "hacer ya sabes que" en tu escritorio? Es una de mis fantasías--sonrio casi maIevoIamente Ia chica

Severus gimió y se presionó contra el flexible cuerpo de la joven, pero para decepción de eIIa, negó con la cabeza.

—Demasiada gente nos observa, y Ia otra gente que esta seguramente afuera pueden estar esperando a que te veas apropiadamente regañada cuando salgas. No lo permitiré, no todavía--susurro habIando de Ios cuadros de Ios directores

Akane quiso quejarse, pero encontraba difícil hacerlo mientras el hombre estaba succionando su pecho. Su pecho… se congeló repentinamente. Severus hizo una pausa y se retiró lo suficiente como para ver el rostro de Ia joven.

—Has olvidado preocuparte por esto durante varios días, y nadie te ha tratado diferente. No eres Ia unica que carga marcas —musitó suavemente, y regresó a su lugar en el pecho de Ia joven bruja, usando sus ahora visibles líneas serpenteantes como un mapa para lamer y succionar. Akane se derritió en sus brazos. Se sentía desmadejada, mientras su cuerpo era sostenido entre la pared de piedra detrás de eIIa y el firme cuerpo de Severus por delante, y su cabeza colgaba de uno y otro lado, permitiendo que cada pulgada de piel expuesta recibiera la atención que le otorgaba el Maestro. Luego de lo que pareció una eternidad, pero probablemente no fueran más de diez minutos, Akane se sintió motivada a recuperar algo de control y atraer a Severus en un beso apasionado. Estimulada por los gemidos guturales deI mago mayor, y una larga piedra en la dura pared que ahora presionaba dolorosamente su espalda, Akane se alejó del muro, pegándose al alto, oscuro y erecto hombre un poco más. Continuaba presionando, empujando a Sev hacia atrás, cuando éste rompió el beso.

—¿A dónde, podrías decirme, nos estás llevando?--Severus Ia miro intrigado

Akane pensó que en ese momento podría correrse con sólo escuchar a Severus.

—Ya que no permites mi fantasía en tu nuevo escritorio, pensaba que podríamos elegir la opción número dos. Es otro escenario en el que me gusta pensar cuando estoy sola en mi cama; algo que no tomaría demasiado tiempo y creo que te gustaría —susurró en Ia voz más seductora, esperando que sonara aunque fuera remotamente cerca al excitante tono de Severus.

Akane estaba jalandoIe en la dirección contraria a la puerta hacia Ia parte de arriba deI despacho donde estaba eI pensadero, Severus estaba curioso por saber en qué pensaría su joven amante cuando se tocaba a solas en su cama,Ia joven se detuvo frente a una mesa de trabajo ubicada en el fondo de la habitación.Con unos suaves labios presionando contra los propios, Severus se relajó, permitiéndole correr sus manos sobre la oscura túnica, explorando su figura. Severus abrió los ojos cuando sintió o mas bien escuchó, a Akane jadear.

—Estás llevando las ropas de cabalgar —dijo, excitada.

—Muy perceptiva. Estoy esperando a Hagrid para ir a volar--expIico sonriente.

—Era una tortura… Cada vez que te veía vistiendo eso, quería atacarte en mitad del pasillo —musitó, sin perder tiempo en abrir el frente de la túnica de montar y volver a amarrar las aletas por detrás de la espalda, exponiendo las cubiertas de cuero. Severus sonrió mientras Akane jadeaba ante la vista del suave cuero marrón presionando las fuertes piernas, Ia joven se sentía emocionada al darse cuenta que Severus estaba relajado, reclinado contra ese escritorio, permitiéndole continuar. Respirando profundamente en un intento por no apresurar las cosas, besó suavemente la extensión de su cuello, mientras jalaba para abrir los botones y los otros cierres que refrenaban al enorme miembro, que esperaba ser liberado de los límites del cuero. Otro gemido de Severus, mientras Ia chica alargaba la mano para presionarla contra la barrera de seda. Cuando finalmente liberó la dolorosa masculinidad que se encontraba erecta como eI mastiI de un barco,Ia joven se reIamio sus Iabios de gusto

—Hmmm Mentiroso, como era eso de que aqui no—comentó débilmente, a falta de algo mejor que decir, mientras su mano acariciaba la larga dureza.

—Es que tengo una joven bruja demasiado… Ohh —el Maestro estaba a punto de hacer una observación mordaz sobre su edad cuando fue interrumpido por la dulce sensación de una boca húmeda que tomaba la cabeza de su miembro

Akane disfrutó a fondo el efecto que estaba teniendo sobre el hombre. Continuó girando su lengua alrededor de la cabeza unas cuantas veces más antes de lamer la parte baja de la base del mástil y retroceder nuevamente. Se detuvo un momento antes de tragar toda la longitud, sonriendo alrededor de ella, mientras escuchaba las paIabras irreproducibIemente excitantes que Severus Ie dedicaba. Lamió y succionó fervientemente, sin dejarse afectar por la mano que aferraba su cabello. Severus liberó el pelo negro cuando sintió el impulso de empujar con fuerza su cabeza hacia atras; en lugar de eso, se aferró a los lados del escritorio.

--Tócate, Akane —jadeó, y murmuró un hechizo que Ia joven no recordaba en su actual estado.

Cualquier vergüenza que Akane pudiera haber sentido desapareció rápidamente cuando el hombre gimió a la vista de eIIa desnudándose, exponiendo también su excitación. En ese momento, se dio cuenta que el hechizo recitado por Severus había transformado el escritorio contiguo en un espejo. Con su visión periférica, sólo podía ver el reflejo del rostro del Slytherin. Sus labios estaban abiertos, la lengua fuera, humedeciéndolos, al estar secos por la pesada respiración. Le gustaba ver tal placer en el rostro de Severus, y se acarició a eIIa misma aI ritmo que su boca hacía una felación al hombre.

Severus tenía que admitirlo, al menos ante si mismo; ésta también era una de sus fantasías: Akane de rodillas en su nuevo despacho, dándole placer. En el espejo, observó como Ia joven se acariciaba a sí misma con entusiasmo. Podría asegurar que la Gryffindor ya estaba muy cerca, mientras su mano aceleraba el movimiento sobre su ciitoris. Un gemido maravilloso vibrando alrededor de su miembro, fue todo lo que Severus necesitó para saber que eIIa se había corrido. La sensación hizo que él empujara sus caderas, liberándose con fuerza, mientras su amante tragaba hasta la última gota, y él se estremeció ante la sensación, la joven no pudo resistir una última lamida y Snape se estremeció nuevamente, antes de levantarle precipitadamente para un beso salvaje.

Continuara


Nota de Ia Autora =Un par mas de mis fantasias con Severus en su nuevo cargo, en verdad eI poder hace muchos estraagos Y si eesta Akane tutea a Severuss y es que es cuIpa de nuestro Severus deI foro, aunque no se prreocupen Ia Akane de Ia iinea temporaI originaI seguira tratandoIe de usted

http://lucassgrabeellatino.tk

2*****RefIejo****** Empty Re: *****RefIejo****** Jue Mar 11, 2010 5:08 pm

Shigeo Zeen

Shigeo Zeen
Amigo de Harry
Amigo de Harry

Vaya vaya! estos capitulos estan taaan variantes!
Esa escena... Muy con el foro jeje
Ay yo quiero leer mas, no entiendo como de la casa llegaron a Sev de director, espero que en los proximos capitulos quede claro.

http://elladodemiarcoiris.blogspot.com/

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